Es muy común escuchar que las palabras se las lleva el viento, pero las acciones se quedan tatuadas en muchas ocasiones aun en el alma. Si no cuidamos nuestra forma de hablar, actuar o pensar cuando interactuamos con las personas que amamos podemos ocasionar heridas que permanecen abiertas como carne viva abrazada por el calor del fuego o martirizada por la sal de la amargura que corroe el corazón de quien ha sido victimizado consciente o inconscientemente por nosotros mismos, que somos las personas a quienes ellos también aman.
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Time is unforgiving, as the earth relentlessly continues to rotate on its axis every day, as it advances in its unstoppable movement around the sun. The seconds are combined into minutes. The minutes intertwine one after the other until they become hours. The hours play between day and night forming weeks that, reflected in the calendar of life, become months until they dissolve between the hands of the clock year after year.
El tiempo no perdona, ya que implacablemente la tierra sigue girando sobre su eje cada día, mientras avanza en su imparable movimiento alrededor del sol. Los segundos se combinan hasta ser minutos. Los minutos se entrelazan uno detrás del otro hasta convertirse en horas. Las horas juguetean entre el día y la noche formando semanas que, plasmadas en el calendario de la vida, se convierten en meses hasta diluirse entre las agujas del reloj año tras año.
Pale and dismayed, Eduardo could not answer immediately. He felt his whole body vibrating, while his masculinity woke up when he felt the rose of Ana’s hands caressing his face and hair. Stunned and with his mind alienated by the accumulation of sensations awakened by the smell of roses in spring that Ana’s perfume emanated, he slowly stammers “Yesss, Yes I want to marry you Ana”. As he watched as her reddish-gold hair shone in the sunlight, wishing for that moment to become eternal and never end.
Pálido y consternado, Eduardo no pudo contestar inmediatamente. El sentía como todo su cuerpo vibraba, mientras su masculinidad se despertaba al sentir el rose de las manos de Ana que le acariciaban el rostro y el pelo. Aturdido y con la mente enajenada por el cumulo de sensaciones que despertaba el olor a rosas en primavera que emanaba el perfume de Ana, lentamente balbuceo “Sssi, Si me quiero casar contigo Ana”. Mientras observaba como los rojizos-dorados cabellos de ella brillaban a la luz del sol deseando que ese momento se volviera eterno y que nunca terminara.
With a pale face, trembling legs and holding the baby car seat, Susana was in front of the hospital doors when her friend Irene came to pick her up, to take her back to her apartment. The tragic news of the collapse of the little train was resounding in all the media, while in Susana’s heart it echoed like an explosion of anguish and fear for what might have happened to her family.
Con el rostro pálido, las piernas temblando y sujetando firmemente la silla de bebe, se encontraba Susana frente a las puertas del hospital cuando su amiga Irene llego a buscarla para llevarla de regreso a su apartamento. La trágica noticia del desplome del trencito estaba resonando en todos los medios de comunicación, mientras en el corazón de Susana retumbaba como una explosión de angustia y miedo por lo que le hubiera podido ocurrir a su familia.