NO ESTOY SOLO.

Sumergido en la inmensidad de la incertidumbre.  Tratando de encontrar una explicasion del ¿Por qué? Me siento tan inutilizado, olvidado y frustrado frente a un mundo que me sofoca hasta hacerme sentir perdido en mi soledad…

¿Por qué me resulta tan difisil expresar lo que siento?  ¿Por qué simplemente no puedo ser feliz?  ¿Por qué me hiere el señalamiento de dedos mesquinos que apuntan hacia mi?  ¿Por qué no encuentro una respuesta logica al porque de mi existir?

Abrumado, confundido, lleno de desesperación, siento que no encajo en el rompecabezas de mi existir.  Veo a todas las personas sonreir.  Mientras el viento brumoso que sale de sus bocas me golpea con fuerza hasta hacerme sucumbir, ante la incredulidad de sus palabras,  que hablan de mi.

Y trato de olvidar que auque me esfuerzo no puedo ser perfecto.  Y trato de olvidar que vivo queriendo complacerlos.  Y trato de olvidar que aunque puedo respirar siento que estoy muerto.

Asi, mientras mis pensamientos vuelan entre la linea de la vida y el velo que me separa de los muertos, mi alma lucha en contra de mis propios pensamientos.  Mi alma grita que la vida no terminara aunque se desprenda de mi cuerpo. 

Las lagrimas en mis ojos oscurecen mi vision y no me permiten ordenar mis sentimientos.  Obligandome a caer al suelo. Agotado y totalmente sin fuerzas en mi cuerpo para seguir luchando, estoy aquí dispuesto a dejarme vencer por el miedo.

En la profundidad de lo inexplicable que resulta definir lo que siento, el viento acaricia mi cabello, el rocio de la mañana sobre el pasto fresco, humedece mi pecho.  Los primeros rayos del sol penetran mi corazón para darme calor.  El canto de los pajaros desvanecen la nubosidad de mis pensamientos.  El suave murmullo de la naturaleza me recuerdan que YO NO ESTOY SOLO.

Porque aunque el mundo entero me ataque, me juzgue o me condene sin comprenderme, mi alma grita que yo puedo ser feliz ya que NO ESTOY SOLO.

En la adversidad, la tristeza, el dolor y sufrimiento NO ESTOY SOLO, porque su amor me consuela, me guia, me protege y me alienta a no dejarme vencer por mis propios errores o debilidades.  Y la luz de ese conocimiento me levanta del suelo.

Sintiendo como vibra dentro de mi, su consolacion que le grita a mi alma que “YO NO ESTOY SOLO” porque el vive en mi.  Reconozco que el conocimiento de saber que soy su hijo me ayudara a vivir. Ya que Jehova es mi fortaleza, mi guia, la luz que me indica el camino a seguir.  El poder que derrumba toda oscuridad.  La fuerza que destruye toda maldad.  La calma que apacigua toda tormenta.  La paz que frena las guerras.  El amor que enternece a las fieras.  La seguridad que me mantiene de pie cuando la tentacion me enfrenta  a mis flaquezas.  El gozo que me anima a ser feliz.

¡SI!  Mi alma grita que no estoy solo.  Entonces subitamente el huracan construido por mis pensamientos y que amenazaba con desruirme por completo.  Se comienza a hacer pequeño porque jamas estare solo, si JEHOVA de los ejercitos pelea junto a mi…